PARA VOLAR... HAY QUE LANZARSE AL VACÍO
"Estamos aquí para dar un mordisco al Universo. Si no, ¿ para qué otra cosa podemos estar aquí?
Steve Jobs
A medida que voy transitando por este viaje de la vida... las distintas creencias y posturas que aparentemente estaban asentadas y sostenían mi forma de proceder y de verme a mí misma y a los otros se van tambaleando y más bien me resultan grandes amarras que me separan de vivir realmente esta experiencia en completa libertad...
Todo lo que me resulta ya conocido y supuestamente "seguro" es aquello que precisamente me recuerda que hay otros caminos que explorar.. que la vida está constantemente ofreciéndome infinitas posibilidades para soltar ataduras enquistadas y limitaciones auto-impuestas, pero muchas veces somos como autómatas que actuamos y nos comportamos desde lo que ya hemos probado o que ilusoriamente "controlamos" y que creemos nos llevará a tal o cual resultado o a ese esperado fin.
Sin embargo, la vida nos recuerda una y otra vez que el CAMBIO es lo que realmente es inherente a lo existente, pero parece que nos resistimos a esta realidad, y al hacerlo, nos mantenemos en nuestra burbuja de cristal. Y mientras más nos empeñamos en reforzar esta burbuja, más frágil e inservible se hace hasta que inevitablemente explota y nos da en la cara.
Ante ello aparece una tremenda oportunidad para abrir los ojos y mirarnos, vaciarnos de condicionamientos y decidir DESPERTAR... resurgir de nuestras cenizas. También podemos optar por la negación y el miedo, a partir del cual construiremos otra burbuja distinta pero que nos llevará finalmente a otra implosión, seguramente aún con más impacto.
Podemos seguir dormidos, actuando según lo que creemos saber, deambulando en círculos por el sendero conocido o realmente encarnar el salto al vacío. La palabra vacío en su acepción básica significa: "falta de contenido físico o mental", de forma que hacer el salto hacia él requiere liberarnos de lo aprendido en el campo de la materia y en el campo mental.
Es como un nacimiento por decisión propia, sabiendo que el nacer es en sí mismo un salto a lo desconocido... pero allí radica su magia... en la presencia plena que supone abrirse verdaderamente a la vida... es ver y experimentar todo con plena atención al presente ... al encuentro de la aventura: con la libertad del creador, la intrepidez del explorador, el coraje del guerrero y la inocencia del niño interior.
La vida nos murmura a cada momento que somos libres para FLUIR y experimentar, morir y renacer, soltar y crear, equivocarnos y aprender, danzar bajo un ritmo nuevo y lanzarnos al vacío... desplegar las alas y entregarnos a volar... adaptándonos al viento que sople.. al sol o a la lluvia.. al día o a la noche... al frío o al calor...en el vuelo nos permitimos fluir con todo lo que está alrededor desde nuestro fuero interno.. somos libres y ese es el mayor regalo.
Ante ello aparece una tremenda oportunidad para abrir los ojos y mirarnos, vaciarnos de condicionamientos y decidir DESPERTAR... resurgir de nuestras cenizas. También podemos optar por la negación y el miedo, a partir del cual construiremos otra burbuja distinta pero que nos llevará finalmente a otra implosión, seguramente aún con más impacto.
Podemos seguir dormidos, actuando según lo que creemos saber, deambulando en círculos por el sendero conocido o realmente encarnar el salto al vacío. La palabra vacío en su acepción básica significa: "falta de contenido físico o mental", de forma que hacer el salto hacia él requiere liberarnos de lo aprendido en el campo de la materia y en el campo mental.
Es como un nacimiento por decisión propia, sabiendo que el nacer es en sí mismo un salto a lo desconocido... pero allí radica su magia... en la presencia plena que supone abrirse verdaderamente a la vida... es ver y experimentar todo con plena atención al presente ... al encuentro de la aventura: con la libertad del creador, la intrepidez del explorador, el coraje del guerrero y la inocencia del niño interior.
La vida nos murmura a cada momento que somos libres para FLUIR y experimentar, morir y renacer, soltar y crear, equivocarnos y aprender, danzar bajo un ritmo nuevo y lanzarnos al vacío... desplegar las alas y entregarnos a volar... adaptándonos al viento que sople.. al sol o a la lluvia.. al día o a la noche... al frío o al calor...en el vuelo nos permitimos fluir con todo lo que está alrededor desde nuestro fuero interno.. somos libres y ese es el mayor regalo.
Podemos seguir esperando a es momento preciso que nos decimos a nosotros mismos será el "ideal" para por fin lanzarnos a la vida... a hacer lo que realmente sentimos... o simplemente ser nosotros el disparador de ese momento... desvincularnos del área de confort que nos achica y abrazar lo que la vida nos trae a cada momento... experimentar dando pasos en otro sentido.. mirando con ojos nuevos ... con entrega y bajo la voz del corazón.
A qué estamos esperando?... el momento es AHORA... la vida es un instante... desempolvemos nuestras alas y disfrutemos del vuelo!!
"Reír, es arriesgarse a parecer tonto.
Llorar es arriesgarse a parecer sentimental.
Alargar el brazo para tomar a otro es arriesgarse a implicarse.
Mostrar los sentimientos propios es arriesgarse a mostrarse uno mismo.
Exponer tus ideas o tus sueños, es arriesgarte a perderlos.
Amar es arriesgarse a no ser correspondido.
Vivir es arriesgarse a morir.
Tener esperanzas es arriesgarse a perderlas.
Lanzarte es arriesgarse a fallar.
Pero los riesgos deber ser tomados.
Porque el peligro más grande en la vida es no arriesgar nada.
Si no haces nada, si no arriesgas nada, tu existencia se oscurece.
Se pueden evitar sufrimientos y preocupaciones, pero simplemente
no vas a aprender, a sentir, a cambiar, a crecer, a amar ni a vivir.
Encadenado a una actitud de miedo, uno se convierte en esclavo…
Y pierde su libertad. Sólo eres libre si te arriesgas."
William Arthur Ward
William Arthur Ward
NAMASTÉ
Comentarios
Publicar un comentario